miércoles, 27 de enero de 2016

¡Año Nuevo!, ¿Y yo?





"Al fin y al cabo somos lo que hacemos para cambiar lo que somos".

Eduardo Galeano.



Inicia un año nuevo, y nosotros los mortales ¿Podemos ser nuevos? ¿Tú que piensas? ¿Será entonces que de nosotros depende?, pero quizá digas “¿Nuevo yo?”, si tengo tantos años, o he vivido tanto a mi corta edad, o tan poco en mi larga edad, y eso te haga pensar que nuevo ya no puedes ser. ¿Qué cambiarías de ti? Y no hablo de cambiar de nariz, ojos, boca, cuerpo, o alguna parte de nuestro físico, eso con todo respeto no es ser nuevo, ya que cambias sólo tu apariencia.


Pero si el cambio lo haces respecto a tus costumbres, creencias, actitudes, hábitos, conductas, adicciones, entre otras más que han sido limitantes en este año que pasó, toma tu tiempo. Si ya te diste cuenta qué es lo que te gustaría cambiar, date unos minutos para asimilarlo y encontrar una manera que te permita lograr esos cambios. No será fácil, pero puedes comenzar a eliminar la forma en que te hablas a ti mismo, eliminando frases como: “No puedo”, “No es para mí” o “Ya es demasiado tarde” y cambiarlas por un “Yo elijo”, “Yo quiero”, “Es el momento” o Es para mí”.  Observa que notas en ti al cambiar las palabras, es importante que al menos te des la oportunidad de intentarlo, puedes iniciar con una semana y le vas aumentando poco a poco. No olvides de ir disfrutando tus logros.


Entonces, ¡manos a la obra!, a iniciar el año con un nuevo pensamiento lleno de posibilidades y alternativas para ser una persona dispuesta a ser nueva.



Psic. Maira Germán Gutiérrez

Educación Continua

lunes, 25 de enero de 2016

Azúcares Refinados, ¿Qué efectos tiene el azúcar en el cerebro?








Se que más de alguna vez has escuchado que el azúcar acelera a los niños. Pues bien, déjame decirte que es cierto. La azúcar refinada resulta muy adictiva para nuestro cerebro.  

Pero, ¿A qué nos referimos cuando hablamos de azúcar refinada?, es el azúcar que ya ha pasado por todo un proceso para descomponerse y llegar a ser lo que es en este momento, no es más que el azúcar de caña o azúcar blanca. Este tipo de azúcar altera las estructuras cerebrales que tienen que ver con la memoria, aprendizaje y comportamiento. 


El azúcar refinada es un tipo de azúcar simple, por lo que es muy fácil digerirla y por ende, el efecto de tener un niño hiperactivo, con falta de atención y menos rendimiento escolar, es debido a esa facilidad de este tipo de azúcar para llegar al cerebro y acelerar las neuronas que son las que hacen que nuestro cerebro funcione. La encontramos en muchos productos que consumimos día a día, como  refrescos, galletas, golosinas, pan, frituras, entre otras. Por lo que es importante leer sus etiquetas y ver los ingredientes que contienen, entre ellos, el tipo de azúcar. Todos aquellos productos que contienen simplemente azúcar, azúcar de caña o fructuosa, es que tiene azúcar refinada. 


Es por ello que te proponemos que mandes a tu hijo a la escuela con lunch en vez de darle dinero, para que así disminuya el consumo de estos alimentos. Algunas alternativas más saludables pueden ser: almendras y nueces mezcladas con arándanos, cacahuates naturales, o también puedes mandarle pepino y jícama picada con limón y sal, disminuyendo así el consumo de este tipo de azúcar en tu hijo. Procura evitar comprar productos que contengan azúcar refinada, y sustituye por azúcar mascabado (azúcar café) o stevia. En caso de querer endulzar, puedes utilizar también opciones como los dátiles, miel de abeja (natural), plátanos, etc. 


Así que te invito a romper con la práctica de que “los dulces son para los niños”. Cuando se inventaron se dieron cuenta que los niños se mantenían “entretenidos” comiendo algo que les gusta, en vez de comer algo que les nutra. Pero, ¿realmente vamos a seguir promoviendo que nuestro hijo consuma golosinas aun sabiendo las alteraciones que se producen en su cerebro, su conducta y rendimiento escolar?


Tú eres el conductor del cerebro de tu hijo. ¡Cuídalo!


Dra. Thalía Cristina Leyva Torres.
Coordinadora AFYCC
Médico Certificado LINCA


miércoles, 20 de enero de 2016

Acercate a nosotros.






En Estrella Guía encuentras un camino fortalecido con investigación actualizada para orientar, capacitar y acompañar a padres con hijos con lesión cerebral.

Para Estrella Guía, una lesión cerebral es el daño que se presenta en el cerebro con consecuencia discapacitante en procesos sensoriales, cognitivos y/o motrices como: 

·         Síndromes Down, Autismo, Asperger, West, entre otros.
·         Trastorno Generalizado del Desarrollo.
·         Déficit de Atención e Hiperactividad.
·         Parálisis Cerebral.

En nuestra institución te capacitamos a ti papá o mamá, para que te conviertas en el excelente terapeuta que tu hijo necesita. Para lograrlo te proporcionamos el Programa de Acondicionamiento Físico y Conexiones Cerebrales (AFYCC), donde mediante visitas mensuales o semestrales, según se requiera, te brindamos apoyo y la supervisión necesaria.
La estrategia de rehabilitación la determinamos partiendo de un proceso, que comienza en conjunto con los padres, mediante una visita inicial. Abrimos un expediente en el que participas llenando un formato a entregar en un tiempo no mayor de 2 horas, previo a la cita (con duración máxima de 2 horas; valor de $500 a $100 pesos por como cuota mínima).
Comunícate con nosotros para proporcionarte el formato inicial y agendar tu cita.



Sayra Alicia Mejía López
Vinculación


Presentación de programas Educación Continua 2016


Hoy miércoles 20 de enero a las 5 de la tarde, tendremos la presentación de nuestra oferta educativa para este 2016. ¡Los invitamos! entrada gratuita, está oferta está dirigida a todas aquellas personas que están interesadas en conocer nuestro plan de trabajo ‪#‎EstrellaGUIA‬

lunes, 18 de enero de 2016

¿Por qué el arrastre es tan importante para las conexiones cerebrales?





Cuando nuestro hijo está pequeño, una de las cosas que más nos preocupa como mamá o papá es el hecho de que pueda caminar, considerándolo uno de los mayores logros de su vida. Pues bien, efectivamente si lo es, sin embargo, el arrastre también, y muchas veces no le damos la importancia que realmente necesita.


Cuando el niño esta pequeño, es muy importante colocarlo en posición boca abajo (siempre bajo observación) para motivar a que el niño realice movimientos que van a ir fortaleciéndolo físicamente. Una de las cosas que se logra con esto es que el niño se arrastre. Y, ¿por qué considero que esta actividad viene siendo el mayor logro del niño? Porque es cuando el niño logra ser independiente por primera vez. El arrastre en un niño pequeño permitirá que siga fortaleciendo su cuerpo, para después pasar al gateo y posteriormente a la marcha (caminar). Además, cuando el niño lo esté haciendo estará desarrollando y propiciando las conexiones cerebrales que son las que van a ir brindándole mayor madurez neurológica. Con esto, no estoy diciendo que si el niño no se arrastra nunca va a gatear o caminar, sin embargo, lo estaremos privando de realizar el mayor número de conexiones cerebrales posibles para una mejor organización y madurez neurológica, lo que permitirá que tenga una mayor coordinación para realizar actividades físicas permitiendo así una mejor integración social, que tu hijo sea más atento, tenga un mejor agarre de los objetos, una mejor lectura y comprensión de la misma, y por ende un mejor aprendizaje, entre muchas cosas más. 


¿Recuerdas que en el boletín anterior te estuve platicando respecto a lo que es el patrón cruzado? Pues bien, alguna de las actividades para realizar ese patrón cruzado es el arrastre, con el cual va obtener y aprovechar las conexiones cerebrales. Es por ello que te invito a que aunque tu hijo ya esté más grande, lo motives a realizarlo. 
  
¿Cómo se realizar el arrastre?

1.     Niño/a acostado boca abajo.

2.     El cuerpo debe permanecer en contacto permanente con el suelo durante todo el tiempo.

3.     Al inicio, los ojos miran la mano que avanza, situada a la altura de los ojos. Posteriormente, miran al frente hacia un punto fijo.

4.     Deslizar las manos y piernas en patrón cruzado. Al doblar pierna derecha, brazo izquierdo va al frente y al doblar pierna izquierda, va el brazo derecho al frente.

5.     Sus manos deben estar extendidas (abiertas) sobre el suelo.

6.     Hacer impulso con el dedo gordo del pie de la pierna flexionada.

7.     Es importante realizarlo en una superficie firme y con ropa cómoda, así como proteger sus rodillas.


Para hacer la actividad más divertida, puedes crear historias para que sea atractivo para ellos. Y, ¿Por qué no? Atrévete tú también a realizarlo junto con ellos, pasando un momento agradable y de convivencia. 


Recuerda, en tus manos está potencializar las habilidades de tus hijos.


Dra. Thalía Cristina Leyva Torres.
Coordinadora AFYCC
Médico Certificado LINCA